miércoles, 28 de julio de 2010

EL PODER TRAS CARLOS ROCA

En mi país, el Perú, los peruanos nos quedamos sorprendidos por una noticia que obtuvo dos portadas de dos diarios de circulación nacionaL: Perú 21 y Expreso. Ellos anunciaban que el partido oficialista, el APRA, retiraba de la campaña municipal por el sillón edil de la plaza más importante que es Lima, la capital peruana.

Según esas versiones, con el famoso "fuentes dignas de todo crédito, aseguraban que tras una reunión de la Comisiòn Polìtica del APRA, con presencia del máximo líder y Presidente del Perú, Dr. Alan García Pérez, se habría decidido RETIRAR DE LAS ELECCIONES MUNICIPALES AL DR. CARLOS ROCA CACERES.

Bueno, las reacciones no se hicieron esperar pero de manera especial y enérgica del propio candidato, Roca Cáceres, que se había enterado por los periódicos, lo que provocó, como es natural, poner paños fríos al Presidente de la Dirección Polìtica aprista, Javier Velásquez Quesquén, y el Secretario General político, Wilber Bendezú, quienes dijeron al unìsono: LA CAMPAÑA DE CARLOS ROCA SIGUE EN PIE.

Esto no fue suficiente para detener los análisis de los periodistas peruanos que inmediatamente, pusieron en blanco y negro, sus particulares punto de vista sobre el particular.

Y como este episodio polìtico, sin lugar a dudas, es una demostraciòn del PODER nos hace oportuno presentar los comentarios de Augusto Alvarez Rodrich y Mirko Lauer del diario La República y de Mariella Balbi,El Comercio:



El gamonal y su chacra

Por Augusto Álvarez Rodrich

El Apra nunca será un partido moderno con Alan García

Qué difícil debe ser el esfuerzo de construir un partido político que merezca realmente ese nombre cuando su propio líder es el principal interesado en petardear su situación actual y en demoler su perspectiva futura con el fin de que la agrupación nunca sea algo más que la combi para el transporte de sus ambiciones personales y que sus militantes nunca asciendan más allá del nivel de peón de chacra al servicio exclusivo del gamonal.

Ese es el problema de fondo del Apra que volvió a ser evidente en la discusión sobre la continuidad o cancelación de la candidatura municipal de Carlos Roca. Mientras él convocaba para la presentación de su plan de gobierno, en su partido debatían sobre a quién apoyar ahora en la elección.

Decir ‘su partido’, sin embargo, puede ser una exageración pues el único que toma las decisiones relevantes en el Apra es el presidente Alan García. Inicialmente, él estuvo en contra de la candidatura de alguien del partido y no perdió la oportunidad de manifestarlo en público.

Luego, este último fin de semana, el jefe de Estado tomó la decisión de arrimar a Roca sin tener la gentileza de avisarle previamente sino mediante una notificación por titular de periódico.

¿Así se trata a los dirigentes del partido? ¿Tan superior se siente García por haber sido la locomotora para que ‘su’ partido llegue dos veces al poder que cree que puede maltratar a quien le dé la gana?

Ningún logro personal puede convertirse en licencia para eso, entre otras razones, porque el fortalecimiento de un partido político requiere, de manera indispensable, el respeto a los mecanismos democráticos al interior del mismo.

Es por eso que el mensaje de ayer de Roca para defender su candidatura frente a la intención de García de abortarla –al margen de que su posibilidad de ganar sea nula–, indicando que esta fue una decisión de una asamblea que no puede ser modificada por una imposición personal, constituyó un llamado relevante por la institucionalidad del partido.

“Basta ya de imposiciones”, fue el reclamo legítimo que Roca planteó ayer y que parece dirigido a García. Pero es, también, un reclamo ingenuo pues es obvio que en el Apra no hay otra voz que ronque que no sea la del presidente del partido, quien ejerce el cargo como un gamonal de chacra.

Si bien eso puede servir al interés particular de García para usar a la agrupación como su plataforma personal con el único fin de hacerlo llegar a Palacio, para el Apra esto constituye la principal limitación para transformarse en un partido político moderno y democrático que contribuya efectivamente al país.



Retirar a Roca, ¿para qué?

Por Mirko Lauer

El retiro o no de Carlos Roca de la candidatura no es en sí mismo importante. Su 1% de intención de voto más o menos establece que él no es la persona por la que van a votar los apristas. La cosa hoy está en quién va a ser el candidato o candidata municipal de esos electores. La cosa no es tan predecible como parece.

Se puede decir en defensa de Roca que ya antes de su aparición las encuestas daban el mismo 1% a “un candidato del Apra”. De modo que Roca no ha espantado un solo voto. Simplemente no ha logrado aparecer en la pantalla. Como si el problema no fuera Roca, sino la idea misma de votar por un candidato del partido de gobierno.

Una versión muy difundida es que las bases apristas tienen la misma actitud pragmática de Alan García frente al fujimorismo, y que por tanto Alex Kouri cosecharía esos votos formalmente sueltos en plaza. De allí –sigue la versión– la resistencia de García a que hubiera un candidato aprista, y su displicencia cuando este apareció.

Pero si en las alturas hay una relación de mutua conveniencia, no parece haber amor perdido entre el pueblo aprista y el fujimorismo. Aunque García tiene recursos para orientar parte de ese voto, lo cual sin embargo entraña el riesgo de haber apoyado a un perdedor. Kouri es, pues, la primera opción alternativa, mas no la única.

El problema de Lourdes Flores en la esquina aprista del escenario es su entendimiento a la vez público y de facto con un Alejandro Toledo cada vez más pugnaz contra el gobierno.

Además los apristas han tenido a Flores como rival en varias ocasiones, desde el choque bancario de 1987. Pero como política corrida podría remontar esos hándicaps.

Entre los candidatos menores ni uno solo da la impresión de ser atractivo para un elector aprista, y ninguno ha hecho el menor esfuerzo por serlo. Si Roca persistiera, él podría ser ese candidato menor. Pero le faltan recursos de todo tipo para enamorar con éxito a sus propios correligionarios y superar la frialdad mortal del recibimiento que ha tenido.

Podemos pensar que una buena parte de la sección indecisos/ninguno/no sabe (18%) en las encuestas aloja a apristas que no saben qué rumbo tomar. En esos casos la tentación sería abstener de votar, si ello no fuera costoso. Queda el voto en blanco o viciado, siempre fuerte en los comicios municipales.

Quizás lo mejor que puede hacer el Apra es mantener a su candidato. Retirarlo, o como se llame esa figura, va a dejar un partido deprimido por un buen tiempo, y eso afectará a las candidaturas apristas de todo el país. Si lo que se busca es evitar una derrota, es de notar que toda victoria en octubre va a ser, por una vía o por otra, contra el aprismo.


'Apromunicipales'

Por: Mariella Balbi


Dicen que la esencia misma de un alcalde es representar al buen vecino. Ese que conoce su distrito y sus problemas al dedillo por vivir mucho tiempo en este, siendo respetado por todos. Para muchos los alcaldes son el comienzo de la antidemocracia: cambian la zonificación a su guisa y antojo, venden áreas correspondientes a parques, decidiendo sobre la propiedad privada del vecino porque, en realidad, un distrito es un conjunto de propietarios. Pese a ello las municipalidades y sus representantes mantienen aún su carácter vecinal.

Por eso vemos infinidad de listas de independientes en todo el país que se lanzan con enorme entusiasmo —a veces poco realista— a las alcaldías. En la plaza limeña las cosas se vuelven más políticas y se exige que el candidato tenga aptitudes gerenciales para administrar una ciudad que cada vez se vuelve más monstruosa y caótica.

La hermosa Lima de antaño tiene hace rato partida de defunción.

El Apra es —dicho por tirios y troyanos— el partido político más solvente del país, sin embargo la alcaldía de Lima le ha sido siempre adversa, salvo la elección de Jorge del Castillo en 1986.

Ya perdieron la conducción municipal en Trujillo y hay probabilidades de que esto se repita en este año. La jalada de alfombra al candidato aprista por Lima Carlos Roca, anunciando su retiro de la contienda, indica que las buenas maneras en esa agrupación aún no cuajan.

Roca se enteró de su renuncia por los periódicos y seguramente algún compañero “chismosón” se lo habrá adelantado.

El poco auspicioso 1% es una razón contundente, ¿pero qué es peor “papelón” retirarse o perder? Parece que el partido aprista no soporta la segunda alternativa. Ocurrió ya con el retiro de Gastón Barúa en el 2002 y no quieren repetir la aplastante derrota de Benedicto Jiménez en el 2006.

Se retire o pierda, la candidatura de Carlos Roca expresa el desinterés del Apra por las municipales limeñas y su obsesión por el verdadero poder, el presidencial. Así las cosas, tienen más interés que Kouri gane en Lima que su correligionario bonzo.

Ya se anunció que hay “mecanismos de entendimiento” con Solidaridad Nacional y la cerrada defensa de Luis Castañeda por el presidente García y los compañeros es elocuente.

El liderazgo y su consecuente caudal electoral permanecerá bajo el monopolio García.

La dirigencia aprista quedó profundamente herida con las denuncias por corrupción contra los dos secretarios generales elegidos, lo que provocó la elección de un candidato mártir para Lima y, probablemente, se previó su retiro.


La maquinaria partidaria depende de un solo designio. El Apra está viendo cómo tener la mayor presencia en el próximo Congreso, ninguna Roca en el camino lo alejará de la ambicionada ruta del 2016.

lunes, 26 de julio de 2010

EL RETO DEL PODER EN ESPAÑA...

La crisis económica que afecta a Europa ha puesto de vuelta y media a los lìderes de esos países, más aún cuando tienen que afrontarla desde una visiòn polìtica progresista - ¿existen progesistas? - y la crisis obliga a tomar decisiones sumamente anti populares.

Es por ello que les ofrecemos la extensa entrevista que le hacen al Presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, que es realmente una anàlisis del PODER.



"He pasado noches sin dormir"

El presidente atraviesa su peor momento. Pero no arroja la toalla. "Que nadie dude de que si hay que adoptar nuevas medidas, lo haré", afirma a EL PAÍS. Ministros y colaboradores trazan su perfil íntimo

JOSÉ LUIS BARBERÍA 25/07/2010

Ha cambiado poco desde que asumió el liderazgo del PSOE hace 10 años. Es un apasionado de la política, consumado estratega del poder, experto en el manejo de personas y el control de los tiempos. Pasó en blanco la madrugada del 10 de mayo, pendiente de la UE y de los mercados.

Ahora parece más tranquilo. "La situación es mala, pero ya no muy mala", explica en una conversación con EL PAÍS. Este es el perfil de un presidente que atraviesa un momento clave


El adolescente que imitaba ante el espejo los ademanes y la abovedada voz de Felipe González se mira ahora en las doradas lunas del palacio de la Moncloa y encuentra a un hombre de rostro angulado, expresión seria, bolsas en los ojos y mirada rígida.

El joven diputado que hace 10 años encandiló a la militancia socialista con un discurso renovador, fresco, ilusionado, opone hoy una sonrisa hierática tocada ocasionalmente con un rictus de amargura. Ya dice Felipe González que a "José Luis" le ha golpeado la realidad de la crisis y que se le nota.

Se nota que la realidad le ha doblado el espinazo programático discursivo y le ha forzado a adoptar medidas que se había comprometido a no aplicar jamás. ¿Le ha quebrado también el ánimo al presidente?

"Parece deprimido". Durante los últimos meses, los visitantes de La Moncloa han dejado flotando en el ambiente la sensación de un Zapatero castigado por la realidad que dictan los mercados financieros y por la vertiginosa pérdida de crédito en los sondeos. Alguno de estos visitantes ha tenido que acallar al taxista deslenguado que le conducía a su cita con el jefe del Gobierno.

"Haga el favor de no insultarle más, que es mi amigo". A propósito del estado anímico del presidente, su anterior director de gabinete, el sociólogo José Andrés Torres Mora, distingue cuidadosamente entre "el violín que toca una melodía triste" y "el violín desafinado".

Quiere decir que Zapatero está somatizando las preocupaciones ciudadanas del momento, pero que su pesadumbre no es patológica y que recuperará su proverbial optimismo en cuanto la sociedad vuelva a respirar con normalidad. Pese a que la situación se ha endulzado con el triunfo de La Roja y la mejora de los datos económicos, la crudeza de la coyuntura está poniendo a prueba al témpano emocional que se supone habita en La Moncloa.


"He pasado ratos muy malos, la verdad, sobre todo a la hora de decidir las medidas de recorte ante el shock económico", indica el presidente.

-No me diga que incluso ha dejado de dormir a pierna suelta.

-He pasado alguna noche sin dormir. La noche del 9 al 10 de mayo la pasé en blanco, primero en contacto telefónico con la vicepresidenta, que estaba negociando en el Ecofin [consejo de ministros de Economía de la UE] nuestro compromiso de reducir el déficit un punto y medio más, que supuso un esfuerzo grande para nosotros. Luego estuve a la espera de ver cómo reaccionaban los mercados. Digamos que pasé la noche esperando al índice Nikkei.

-¿Cómo combate la ansiedad?

-Corro unos diez kilómetros diarios campo a través, pero sobre todo es que yo soy muy tranquilo. Creo que para tener una responsabilidad como la mía, la primera condición personal es tener fortaleza emocional para poder transmitir serenidad. Yo tengo una buena relación con la vida -dice este hombre, más delgado y fibroso últimamente, que heredó de su madre la entereza emocional-. La vida y la política me han tratado bien. No me puedo quejar -subraya.

La crisis le ha arruinado la fiesta del décimo aniversario de su elección como secretario general del PSOE (22 de julio de 2000) y ha envuelto en negros nubarrones su liderazgo.

Pero, con todo, por grande que sea el quebranto en su reputación y duro el panorama, conviene no perder de vista que estamos ante uno de esos tipos que hasta en las circunstancias más difíciles acostumbra a salir de la melée con el balón.

Los apelativos caricaturescos de "Zapatitos", "Mr. Bean" o "Bambi", los juicios descalificatorios que le tratan de improvisador impenitente y saltimbanqui contribuyen simplemente a acentuar el equívoco porque, a estas alturas, ya está claro que Rodríguez Zapatero es un consumado estratega del poder y un experto en el manejo de las personas y el control de los tiempos.


"Alguien que ha ganado dos elecciones generales consecutivas y la secretaría general del PSOE no puede ser un chiquilicuatre", comenta un diputado socialista crítico que no le votó hace diez años, en la creencia errónea de que el diputado por León no tenía recorrido político.

Pueden, pues, condenarle, si les parece, pero no le den por derrotado de antemano.

Zapatero es un atleta de la política apasionado de su trabajo que, sin experiencia de gestión previa, ha logrado cumplir su sueño juvenil de dirigir el PSOE y presidir el Gobierno de España.

"Gana quien llega al final, no quien se queda por el camino" es una de sus frases preferidas. Dice que no cree en la baraka que le atribuye su padre. "Yo no fío nada a la suerte. Lo que hago es trabajar mucho", subraya.

"Antes de ser elegido secretario general, José Luis ya había ejercido el poder dentro del PSOE leonés y probado su capacidad para mantenerse en el caballo sin caerse", explica José Andrés Torres Mora, en respuesta a quienes piensan que la gestión de Zapatero ha acusado su falta de experiencia.

El diputado antes aludido piensa que ser "número uno", aunque sea en el reducido ámbito leonés, ya le enseñó a Zapatero "cómo trata la gente al jefe, cómo le miran y qué esperan de él".


El tiempo ha demostrado lo acertado del juicio que emitieron en su día algunos de los correligionarios leoneses del líder socialista: "Sabe pactar para conseguir el poder, lo lleva en la sangre. Saca partido de las debilidades y virtudes de la gente que tiene alrededor".

Jugador de ajedrez con mentalidad de yudoca, Rodríguez Zapatero estudia minuciosamente al adversario y aplica sus habilidades tácticas a la tarea de aprovechar la fuerza de sus contrarios.

Tiene una visión panorámica y planificada de la política con estrategias a corto y largo plazo.

Admitido que el temperamento y la personalidad rara vez cambian a una edad adulta (el presidente cumple 50 años el 4 de agosto), resulta sorprendente la continuidad metodológica y estilística del político que a los 29 años llegó a ser número uno del PSOE leonés; a los 40, secretario general del PSOE, y a los 44, presidente del Gobierno. "Sigue siendo el mismo, continúa con el mismo móvil y conserva más o menos sus relaciones anteriores.


Es reservado y oculta sus debilidades, suponiendo que las tenga", dice la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. "ZP no es rencoroso, pero raramente olvida un agravio, un feo, un desplante.

Los deja pasar, pero los tiene en cuenta", apunta un antiguo colaborador suyo.

Hay unanimidad en el convencimiento de que no ha cambiado gran cosa en esta década. El mismo político afable y atento -"austero en la administración de los sentimientos", que dice el ex ministro Jesús Caldera-, el temperamento frío, equilibrado, de quien nunca levanta la voz porque piensa que perder los nervios no sirve para nada.


A decir de sus colaboradores, el inquilino de La Moncloa "es una esponja de memoria fotográfica que absorbe lo que lee, ve y escucha". Esa capacidad de asimilación -"sintetiza las ideas que le resultan interesantes y las hace suyas"- es lo que, en opinión del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, permite a Zapatero ganar a Rajoy en las segundas partes de las réplicas parlamentarias.


Si en 1989 se aupó a la secretaría provincial del PSOE leonés gracias a su inesperado pacto con una de las corrientes internas más alejadas de sus posiciones políticas, 11 años más tarde alcanzó la secretaría general en el 35º Congreso del PSOE por medio de una alambicada cadena de alianzas que sumó a su favor votos guerristas y del PSC. "Nos habríamos ahorrado bastantes problemas si Alfonso Guerra no le hubiera entregado sus 30 o 40 votos", declara hoy un muy desencantado Joaquín Leguina, ex presidente de la Comunidad de Madrid.

Desconocido como era en los altos círculos socialistas, Rodríguez Zapatero ganó contra el poderoso aparato del partido que apoyaba la candidatura de José Bono y frente a otros aspirantes como Matilde Fernández y Rosa Díez, en un momento en el que la autoestima socialista estaba por los suelos. "Supo aprovechar la orfandad del partido.

Sentíamos la necesidad de abrir una nueva etapa y pusimos nuestra mirada en José Luis por su frescura, su capacidad de generar empatías y sus dotes de liderazgo. Además, cuando hablaba, que hablaba poco, nos demostraba que conocía el partido como nadie", dice el ministro de Fomento, José Blanco.

Pocos de sus críticos socialistas le niegan el mérito de haber abierto en el PSOE una etapa de renovación necesaria y articulado un discurso modernizador, distanciado del colectivismo clásico de la izquierda, impregnado de la idea de fortalecer los derechos de la ciudadanía y acotar el peso de los poderes económicos y mediáticos.

Por contraste con el estilo que había ido adoptando su predecesor en La Moncloa, la llegada del "talante" dialogante y plural de Zapatero, el primer líder político masculino feminista español, fue percibida por buena parte de la sociedad como una bocanada de aire fresco.

Su pacto antiterrorista con Aznar en septiembre de 2000 le permitió, además, postularse como hombre de Estado y opositor responsable, pese a que su primera andadura al frente del PSOE no fue el paseo triunfal de los últimos años.


"Eran otros tiempos. Entonces la gente hablaba y decía lo que pensaba en el Comité Federal, porque los representantes territoriales eran elegidos por sus bases, mientras que ahora son delegados del partido que deben su cargo al secretario general; todo se dirige desde Madrid", asegura Juan Carlos Rodríguez Ibarra.

Al antiguo líder extremeño le preocupa que en las altas instancias del partido se instale el silencio, el hábito acomodaticio de no discutir, no debatir, no llevar la contraria al jefe por aquello de no arruinar las opciones a un buen cargo.

José Andrés Torres Mora pinta un cuadro diferente de las reuniones de la ejecutiva socialista. "Zapatero acude puntualmente a la cita y no se cansa de escuchar y tomar nota, pese a que sus intervenciones son siempre las mejores con gran diferencia. Es limpio, ordenado, valiente, un gran dirigente honesto y sensato".

-Presidente, ¿cree que ha armonizado correctamente su doble condición de secretario general del PSOE y presidente de España? ¿Cómo ha gestionado esas lealtades?

-En las grandes cuestiones, que no son muchas, solo piensas en tus responsabilidades de gobierno. En los asuntos menos importantes trato de compaginar esas lealtades.

-¿Cómo explica que los ciudadanos piensen que la clase política es uno de los grandes problemas del país?

-Por la crisis económica y porque la confrontación política es, efectivamente, muy agria. Yo también creo que los políticos deberíamos estar a la altura de una sociedad tolerante como la española.

-¿Y qué me dice de esa opinión generalizada de que los intereses de los políticos no se corresponden con los intereses generales?

-No me parece una percepción justa. Hay poderes que pretenden ocupar el poder de la política, que es el único legitimado por el voto ciudadano.

-No me refiero a los políticos individualmente, sino a los grandes aparatos de los partidos convertidos en maquinarias de poder.

-Los políticos y los partidos somos expresión de la sociedad.

Dicen los historiadores del PSOE que nunca hubo un secretario general con tanto poder y menos contestación interna. La pregunta es si ZP padece el "síndrome de La Moncloa", esa tendencia a la megalomanía y al aislamiento que, por lo visto, lleva a alejarse de la realidad y a pensar que la gente no aprecia suficientemente los desvelos y méritos del líder.

Que se sepa, el presidente no tiene un Pepito Grillo -como no ejerza de tal su mujer, Sonsoles, que, según dicen quienes tratan a la pareja, es también su amiga-, ni cuenta con el esclavo que les susurraba a los generales romanos en los desfiles de la victoria: "Recuerda que eres mortal".

Pese a los sondeos de popularidad y los vientos gélidos que soplan por la economía nacional, Zapatero no cree que esté quedándose solo. "No tengo una sensación de soledad. Soy un presidente comunicativo que habla mucho con los ministros y los dirigentes del partido.

Y hablando de soledad, he tenido durante estos años la gran satisfacción de contar con el concurso del Rey, no solo en el plano político, sino también en el personal. Ha sido muy importante para mí, le tengo un gran reconocimiento".

No puede decirse que Rodríguez Zapatero esté ajeno a la realidad; no, desde luego, a la realidad publicada.

Analiza detenidamente las encuestas y se desayuna con la ración diaria de sapos y culebras que le trae la prensa.

Como cabe pensar de un político que cuida tanto su imagen y su lenguaje corporal, el presidente presta gran atención a los medios de comunicación.

Suyo es el mérito de haber puesto fin a la utilización sectaria progubernamental de TVE y haber posibilitado unos informativos razonablemente plurales.

Nadie puede negarle tampoco su decidida apuesta presupuestaria por el I+D+i, que acabó con lustros de inhibición gubernamental.

Según algunos de sus colaboradores, el círculo de máxima confianza del presidente estaría formado por el ex secretario de las Juventudes Socialistas y ahora consejero de Telefónica, Javier de Paz; José Miguel Vidal, primo de Zapatero; los ministros Alfredo Pérez Rubalcaba, José Blanco y Miguel Sebastián; el portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, y el secretario general de UGT, Cándido Méndez, ahora irritado por las medidas de ajuste.

Es un listado que Zapatero amplía enormemente hasta incluir en él a la práctica totalidad de su Gobierno y a su gabinete de La Moncloa.

Dadas las dificultades para articular un proyecto de izquierda, dificultades comunes al conjunto del socialismo europeo, ZP ha cultivado la adhesión de un electorado que apoya el matrimonio homosexual, la memoria histórica..., al tiempo que ampliaba los derechos sociales y subía las pensiones y el salario mínimo, la última vez ya contra el criterio de su entonces ministro de Economía, Pedro Solbes, partidario de un mayor y mejor ahorro por lo que pudiera venir.


"Lo que mejor caracteriza al presidente es su vocación de poder. Supedita todo al supremo objetivo de ganar las elecciones", asegura un antiguo colaborador del jefe del Gobierno que prefiere no ser identificado.

Según él, Zapatero aplica las teorías de George Lakoff, profesor de lingüística de la Universidad de California, sobre la utilidad de tener en cuenta la inteligencia emocional bastante más que las del "republicanismo cívico" de Philip Pettit, su teórico pensador de cabecera.

"El presidente conoce la importancia del voto sentimental y lo busca aunque las ganancias de estas políticas, caso de la memoria histórica, no tienen por qué ser las del país", afirma.

"Trata de situar simbólicamente a la derecha en el pasado franquista y de recabar la adhesión emocional, identitaria, de gentes de izquierda que, racionalmente, podrían llegar a pensar que es un mal presidente".

Según eso, Zapatero sería un político calculador que ha hecho de su habilidad para ocupar la escena política, sacar al adversario fuera del tatami y ganar elecciones su principal activo político.

El que fuera primer presidente de la Federación Socialista de Madrid, Joaquín Leguina, le reprocha haber copiado de Aznar el "defecto de hacer oposición a la oposición".

Sin llegar al grado de "encantador de serpientes" adjudicado en su día a Felipe González, el presidente puntúa también alto en la escala de la seducción.

"Te hace ver que eres la persona más importante, se interesa por tus asuntos personales y centra la atención en ti", señala la ministra Trinidad Jiménez.

"Te puede cesar de ministro y lograr que te vayas contento por contribuir al bien de España", dice, a su vez, un político que habla con pleno conocimiento de causa.

En cuanto ocupó su despacho de Ferraz, ZP empezó a desmontar el aparato, deshizo los equipos anteriores y se puso a volar solo, fuera de la tutela de la vieja guardia del partido.

"Estaba en su derecho. El problema es que no ha querido rodearse de los mejores.

Debería haber escuchado más antes de tomar decisiones trascendentes. No ha manejado bien el inmenso poder que tenía", sostiene un diputado socialista. No es una opinión marginal.

"Ha creado a su alrededor un gran vacío de poder, no ha hecho equipos, sino gente que ejecuta sus instrucciones. Con su móvil, que no lo suelta por nada, ejerce de centro radial de las comunicaciones de forma que todas las relaciones pasan por él. Eso impide hacer equipo", indica un antiguo colaborador del presidente.

"Da bastante autonomía a los ministros; a veces no sabes si lo estás haciendo bien o mal, porque no te echa la bronca cuando algo le disgusta. Él procura seguir una línea persuasiva", dice Jesús Caldera, anterior titular de Trabajo.


Visto lo visto, muchos socialistas reprochan a su secretario general que haya prescindido de los criterios de economistas de la solvencia profesional de Pedro Solbes, Joaquín Almunia, Carlos Solchaga o Miguel Ángel Fernández Ordóñez -aunque aceptó el nombramiento de este último como gobernador del Banco de España.

Y, con razón o sin ella, no pocos socialistas ponen el acento en el contrapunto que supuso la aparente fascinación de Zapatero por Miguel Sebastián, el actual ministro de Industria, a quien Zapatero presentó durante un tiempo como "el mejor economista de España" y "una persona de grandes ideas".

Pretender que los ministros hagan en los tiempos que corren una disección crítica y objetiva de la actuación del jefe de Gobierno resulta, por supuesto, ilusorio, aunque, a base de insistir, se consiga que no todas las palabras vayan fatalmente destinadas a engordar la catarata de elogios a la figura de Zapatero.


Ante el empeño del periodista, el ministro Blanco se estira hasta señalar que puede que el presidente "sea en ocasiones demasiado confiado y adolezca de falta de picardía para ver cuándo la información es interesada y cuándo no".

Y, confrontado al argumento de que no puede haber nadie perfecto, tampoco Zapatero, el ministro Corbacho llega a indicar que "es posible que a veces peque de exceso de confianza".

-"¿Qué ha aprendido en estos años de Gobierno?".

-"Que hay que hacer análisis con las luces largas y que no te puedes atar a las cosas coyunturales", responde con celeridad, como si esperara la pregunta.

-El otro día dijo usted en el Congreso que aplicaría las medidas necesarias para salir de la crisis, le costara lo que le costara. ¿De dónde sale esa determinación?

¿La situación es alarmante?

-La situación es mala, pero ya no muy mala. Dije "me cueste lo que me cueste" porque sé muy bien que las medidas que he adoptado son impopulares, así de claro. Voy a aplicar esas medidas y a mantenerlas.

Tengo que ser responsable y ejercer de presidente en lo bueno y en lo malo. Lo haré por encima de mis aspiraciones políticas de futuro. Y que nadie dude de que si hay que adoptar nuevas medidas, las adoptaré.

-¿También si conduce a su partido a la debacle?

-Quiero que se diga que mi partido hizo lo que había que hacer por el bien de España.

-¿Cómo le gustaría pasar a la historia de España?

-Como el presidente que, además de hacer frente a la crisis, transformó la economía
y llevó a cabo la tercera gran transición económica de la democracia, que completó a las que se llevaron a cabo en los ochenta y noventa. Con las reformas que hemos emprendido debemos generar una espiral económica positiva cuanto antes. Quiero que esta legislatura sea la de la transformación económica. La habríamos hecho en cinco o seis años, pero ahora con la crisis estamos obligados a hacerla en un año. Somos lo que somos como país y debemos ser conscientes de que lo hemos hecho bien hasta ahora en la democracia. Lo que necesitamos es confianza en nosotros mismos como país. La sociedad española siempre ha dado lo mejor de sí en las situaciones de máxima dificultad.

-Supongo que no ha renunciado a ser reelegido.

-Permítame que me reserve esa decisión.

Puede que la palabra audacia, en las variables interpretativas de valentía o temeridad, sea la que mejor defina el comportamiento político de este presidente que sacó las tropas de Irak, negoció con ETA y avaló una ambiciosa reforma estatutaria, convencido de que con ella conseguiría que cuajara la España autonómica. Pocos entre los suyos le niegan intuición, olfato e impronta ganadora. La cuestión es si esa acusada autoconfianza de Zapatero no ha sido contraproducente al abordar los asuntos de máxima trascendencia.


Independientemente de los efectos que el llamado "proceso de paz" haya podido producir en las filas de ETA y Batasuna, parece claro que Rodríguez Zapatero erró en su diagnóstico sobre la voluntad de la banda terrorista y en la valoración de la calidad de las informaciones que manejaba.

"Fiaros de mí, que tengo todos los datos y sé lo que me hago", repitió durante meses. De todas formas, muchos dirigentes socialistas, incluso algunos de los que piensan que en las negociaciones de Loyola "se fue demasiado lejos y se habló de lo que no se debía", elogian la "valentía" de Zapatero, convencidos de que el tiempo sacará a relucir el efecto positivo del proceso.

José María Fidalgo, entonces secretario general de CC OO, recuerda que en octubre de 2005, 14 meses antes de la bomba en la T-4 de Barajas, el presidente anunció a los representantes de los sindicatos y de la patronal que antes de esas navidades iba a acabar con ETA y que ese triunfo le aseguraría la reelección dos legislaturas más.

"Tengo la impresión", dice, "de que es un político tacticista con una visión ligera de la economía y una confianza enorme en la voluntad política y el poder de la ley.

Al poco de iniciarse la primera legislatura, nos anunció que iba acabar con la temporalidad laboral, tal cual. Como nos vio desconcertados, nos pidió confianza en él: '¿No habéis visto que he traído las tropas de Irak?'.

Al parecer, pensaba que se podía acabar con la temporalidad por decreto. Menos mal que Caldera conocía un informe nuestro de 200 páginas sobre el problema y sabía de su complejidad".

El anterior secretario de CC OO detecta también un punto de adanismo (hábito de comenzar una actividad como si nadie la hubiera ejercido anteriormente) en la decisión de ZP de "reabrir sin mayor consenso el Estado autonómico".

En la memoria de muchos socialistas ha quedado la impresión de que Pasqual Maragall engañó a Rodríguez Zapatero con la negociación del proyecto estatutario.

"Si Zapatero dijo aquello de que aprobaríamos el estatuto que saliera de Cataluña fue porque confiaba en que Maragall respetaría el acuerdo sobre el alcance competencial al que los socialistas habíamos llegado en Santillana del Mar. Lo que pasa es que Maragall no actuó lealmente", subraya Juan Carlos Rodríguez Ibarra.

El presidente se mostraba entonces plenamente confiado en su capacidad de persuasión. "No os preocupéis, que yo convenceré a Pasqual", repetía.

Hoy son muchos los socialistas preocupados porque el "esfuerzo de generosidad hecho con Cataluña no ha mejorado la relación de esa comunidad con el resto de España", pero si Zapatero sobrevivió políticamente a la bomba de Barajas podría también sobrevivir al desenlace del estatuto catalán.

Nadie en su partido se plantea hoy por hoy la alternativa. "La única alternativa a ZP es ZP. Sigue siendo nuestro mejor activo", subraya el ministro Corbacho.

-Presidente, ¿puede indicarme dos aciertos claves de su mandato?

-Haber sacado las tropas de Irak y...

-¿Incluso con la precipitación con que se hizo?

-Fue un gran triunfo de la voluntad democrática. Si hubiese esperado, no habríamos podido hacerlo.

-¿Por las presiones?

-Sí. El segundo acierto, aunque sea arriesgado decirlo, fue el proceso de paz. Tengo la convicción de que ahí se sembró una solución definitiva. Tengo esa confianza.

-¿Y dos errores de su gestión?

-Cuando la víspera de la bomba en la T-4 dije que estábamos mejor que un año antes y el haber estado demasiado tiempo en el debate de si teníamos una crisis o una desaceleración. No son dos errores menores y es importante que se conozcan públicamente. Yo he aprendido de ellos.

-¿Qué más ha aprendido?

-Los límites objetivos de la acción de gobierno. Asuntos que parecían de difícil aplicación han resultado fáciles, y al revés. El del matrimonio homosexual ha resultado fácil, todo un éxito, mientras que otros, como la capacidad de intervención del Gobierno en la economía libre de mercado, se han revelado lo más difícil.

-¿Se ha sentido impotente ante la economía?

-Más que impotencia..., es que los acontecimientos en la economía globalizada se producen con gran celeridad, mientras que los Gobiernos no somos tan flexibles y tenemos que responder a las reglas democráticas.

Todo hace suponer que la crisis económica será el auténtico banco de pruebas del presidente, el listón con el que le medirá la historia.

Zapatero desoyó las tesis que anunciaban una crisis larga y profunda y se instaló en la teoría del "rebote" que pronosticaba una crisis de seis meses con caída y recuperación muy rápida.

"Los del sindicato le dijimos que esa teoría no tenía en cuenta nuestra burbuja inmobiliaria y que la crisis iba a acarrear en nuestro país el cierre de fábricas de puertas, cristales, piezas de carpintería... En mayo de 2008 estábamos tan alarmados por lo que se nos venía encima que los de CC OO propusimos un plan de ajuste de caballo con congelación salarial incluida.

Luego, cuando nos convocaron a la mesa del diálogo social, estuvimos un mes entero negociando la declaración porque ellos no querían poner en el papel la palabra crisis", dice José María Fidalgo.

Negar la crisis, primero, y anunciar sin base la vuelta al crecimiento, después, solo sirvió para retrasar las medidas a adoptar.

"A lo largo de esta década se ha perfeccionado profesionalmente como político", sostiene Torres Mora.

"Ha comprobado la dureza de la política española", indica Caldera. La ministra Trinidad Jiménez y otros muchos socialistas no creen que se le haya acabado la racha ganadora contra el PP de Mariano Rajoy, pero parece evidente que para revalidar el título dentro de dos años el presidente deberá cargar sobre sus espaldas la roca de la crisis y subirla a la cota del crecimiento económico que España necesita imperiosamente para atajar el drama masivo del paro.

lunes, 12 de julio de 2010

LECCIONES DE POLITICA Y PODER

Don José Barba Caballero todos los lunes nos ofrece una agradable clase de política y poder que se está conviértiendo en un lectura obligada para todos aquellos que están interesados en los entretelones del PODER.

En su habitual columna que publica el diario limeño Correo y bajo el título :"Homo Politicus", nos gráfica que y que hace un político hoy y siempre:




Homo politicus


De mi trato con el animal social y político que es el hombre, he llegado a confirmar las siguientes leyes, cánones o conclusiones:


1.- El instinto de poseer (amor, riqueza, conocimiento y poder) es lo más saltante de la naturaleza humana. Este instinto es innato e irreversible, no está sujeto a revisión por parte de la cultura, funciona como una fuerza inconmovible y es el responsable directo de todo lo que somos. Por esto es el motor de la historia.


2.- Es ley de la naturaleza que todas las criaturas luchen por preservar su vida y busquen la utilidad propia. Todos somos pues egoístas, de aquí que la primera lealtad del hombre sea consigo mismo y sus intereses. Lo que bien traducido quiere decir que todos son potencialmente desleales y, por ende, ninguno es digno de confianza.


Las palabras de Julio César ante el puñal de Bruto: "También tú, hijo mío", es una historia que se seguirá repitiendo hasta el final de los tiempos. Por esto la mentalidad estratégica comienza con la desconfianza y termina con la desconfianza.


3.- De todas las emociones humanas la que más genera amor, abnegación, lealtad y respeto, es el interés. Nadie que obtenga ventajas de un hombre, una pandilla, una iglesia o un partido político, puede ser convencido de que está del lado equivocado. Lo que más une a los hombres son los intereses, lo que más odia un hombre es aquello que afecta sus intereses. Así que repito el consejo de Benavente: "Crea intereses, no afectos". Las causas nobles seducen a las personas� pero el interés asegura el compromiso.


4.- ¡Todos mienten! La mentira está inscrita en nuestro código genético y es un arma para la sobrevivencia; por esto nadie es quien dice ser. Todos los seres humanos tienen algo que esconder, algo de qué avergonzarse, y todos, absolutamente todos transitamos por un sendero sinuoso que toca tanto el bien como el mal. Por estas razones no existen las líneas rectas y todo político que presuma de intachable es con absoluta seguridad un fraude.

Esto es lo que quiso expresar Freud cuando dijo que en cada uno de nosotros se agazapa un Mr. Hyde bajo la superficie de un Dr. Jekyll.

EL PODER DESAIRADO EN CHILE?

En Chile, hace unos días se produjo un incidente entre el Presidente Sebastían Piñera y el entrenador de fútbol chileno, el argentino Marcelo Bielsa, en la ceremonia de agradecimiento por la participación de la oncena chilena en el Mundial de Fútbol en Sudáfrica.

El incidente que emitió la televisión a nivel internacional fue cuando Bielsa dejó, por pocos segundos, con la mano extendida al Primer Mandatario chileno, gesto que fue interpretado como un desaire e inmediatamente algunas voces dijeron que eso ocurrió porque Bielsa es de izquierdas.

El hecho ha provocado retomar los aspectos claves para proteger la imagen presidencial de un jefe de Estado, por eso que la oportunidad es de especial importancia para aquellos seguidores de los entretelones del PODER.

El Mercurio de Chile consultó con los ex asesores de ex Presidentes de Chile:





Tácticas que los asesores piñeristas aún no consiguen implementar del todo:

Seis mandamientos para cuidar la imagen presidencial

Las incómodas polémicas a las que se ha visto sometido el Presidente Sebastián Piñera en las últimas semanas han atizado un intenso debate sobre las estrategias comunicacionales que rigen al Jefe de Estado. "El Mercurio" consultó a ex asesores de Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet, y en base a sus recetas elaboró un puñado de reglas básicas ya probadas para proteger la figura del Primer Mandatario.


Guillermo Muñoz


La polémica en que se vio enfrentado tras la imitación de Stefan Kramer, el público cuestionamiento que delante de él realizó el rector de la Universidad de Chile y el notorio gesto de indiferencia en el saludo de Marcelo Bielsa han dado pábulo en las últimas semanas a un intenso debate acerca del cuidado de la imagen del Presidente Sebastián Piñera y la efectividad de sus políticas para enfrentar a los medios de comunicación.

Incluso, el senador Andrés Allamand y otros parlamentarios de su coalición han manifestado su preocupación. Desde la vereda de la oposición, una serie de asesores que durante veinte años conformaron afiatados equipos preocupados de este tema observan con interés lo que ahora está haciendo La Moneda.


"El Mercurio" consultó a varios estrategas de los cuatro Presidentes de la Concertación, quienes advierten algunos elementos en la estrategia comunicacional del Presidente que faltan por afinar. Y aunque la mayoría expresa sus presunciones de que el estilo autónomo de Piñera impide que acate todos los consejos de sus asesores, trazan seis reglas básicas, que, según ellos, se deben respetar para evitar que el Presidente vea dañada su imagen.


Tener un buen speech writer y dejarlo actuar


"Los presidentes deben hablar en prosa y necesitan un gran redactor de discursos al lado de su oficina", dice uno de los ex asesores.

El elegido, señala, debe estar en permanente contacto con el Mandatario, tener perfecta sintonía con él, construir meticulosamente cada detalle de las alocuciones y dejar el menor espacio posible a la improvisación o eventuales errores. Para todo eso tiene que estar asesorado por un equipo especializado. Uno de los casos más destacados en este sentido es el del ex Presidente Lagos, quien -destacan los distintos consultados- contaba con un " brain trust" de alto nivel intelectual.

Sus discursos para ceremonias oficiales eran elaborados por el académico Eugenio Lahera. Esporádicamente y dependiendo de la importancia de la ocasión, también intervenían los sociólogos Ernesto Ottone y Eugenio Tironi. Lagos, agregan, confiaba plenamente en los textos de sus colaboradores.

Patricio Aylwin contó con la ayuda de su hija Mariana Aylwin y de la historiadora Sol Serrano, mientras que el equipo de Eduardo Frei estuvo integrado por Cristián Toloza, John Biehl y Eduardo Palma. Michelle Bachelet, en tanto, tenía como speech writer al abogado socialista Francisco Javier Díaz, quien, eventualmente, trabajaba los discursos con el ex ministro Andrés Velasco.


En el caso de Piñera, su redactor es el abogado Ignacio Rivadeneira, a quien alaban por interpretar con precisión la voluntad del Presidente.


Rivadeneira, de 34 años, fue quien redactó, por ejemplo, el discurso del 21 de mayo, que fue muy bien evaluado en la Alianza. Pero también escribió la cuestionada alocución realizada por Piñera cuando despidió a la selección y nombró a los jugadores por sus apodos, incluyendo el mote de "loco" para Marcelo Bielsa.
Según los concertacionistas, la intervención puede ser interpretada como una falta de respeto hacia los futbolistas y exponer al Mandatario a que después reciba el mismo trato.

Algunos de ellos agregan que algunas imperfecciones en los discursos de Piñera reflejan que el redactor aún está en rodaje o no es tomado en cuenta por el Presidente.


Los desaciertos ocurrirían principalmente cuando se le da espacio de improvisación al Mandatario, como cuando dio vida a Robinson Crusoe.


En la Alianza, en tanto, recuerdan que la noche del 17 de enero, cuando ganó la segunda vuelta presidencial, Piñera pidió a sus asesores más cercanos que le redactaran el discurso de la victoria. Sin embargo, lo leyó, no le gustó y rehízo varios párrafos del texto.

Las apariciones presidenciales siempre son una puesta en escena


La función del Presidente reviste un carácter simbólico y todas sus acciones deben ir en consonancia con esta estatura. En este aspecto, uno de los puntos más criticados tiene que ver con lo ocurrido en la recepción a la Selección en La Moneda.

"Jamás se debe exponer al Presidente a que la primera reacción ante un tema sea frente a una cámara", dice un ex integrante del segundo piso.

En los anteriores equipos se preocupaban de conversar previamente con los invitados sobre su predisposición en la ceremonia y se les informaba sobre el protocolo, como ocurrió cuando Bachelet recibió a la Selección sub-20 en 2008.

Además, los asesores se preocupaban de que las cámaras entraran a la audiencia una vez que los invitados ya se habían presentado con el Mandatario y no se transmitía en directo el saludo, pues esto exponía al Jefe del Estado a un incidente como el que ocurrió con Bielsa.

El análisis también incluye la exposición ante la prensa. Aunque Piñera ha ido moderando sus intervenciones -el día que asumió habló seis veces ante los periodistas-, en la Concertación comentan que sus continuas declaraciones lo exponen a errores o abren temas anexos que no son cómodos para el Gobierno.

Mientras Bachelet solía aceptar "sólo dos preguntas" -para lo cual los periodistas debían ponerse de acuerdo-, Piñera suele responder sin límites y a veces improvisa puntos de prensa que no estaban agendados.


Transmitir una sola idea fuerza por día


Uno de los elementos esenciales de las estrategias tiene que ver con la concentración de todos los esfuerzos comunicacionales en torno a una sola idea fuerza al día, para evitar que el mensaje se diluya.

Según esta premisa, la intervención en más de un tema por parte del Presidente construye "un menú" amplio para los medios que pueden destacar aspectos negativos para el Gobierno.


En la administración de Lagos, por ejemplo, su jefe de gabinete (tuvo tres: Carlos Rubio, Matías de la Fuente y Enrique Paris) tenía reuniones periódicas con el equipo de comunicaciones, el vocero y el jefe de programación (Pedro Durán) para determinar qué tema se privilegiaría cada día. Para potenciar el mensaje, se conversaba también con los ministros del área para que coparan los medios de comunicación con entrevistas sólo sobre el tema elegido.

A Piñera se le critica un alto nivel de dispersión. El 9 de junio, por ejemplo, anunció su plan de reconstrucción de Codelco, participó de un decomiso de drogas en Calama y comentó la situación del entonces embajador Miguel Otero.

Como consecuencia, recuerdan, cada medio destacó un tema distinto.

El 30 de ese mes, en tanto, anunció el nuevo programa preventivo del Plan Auge. Sin embargo, tras la ceremonia, Piñera comentó también la situación de Cristián López -acusado erróneamente de ser "el violador de Ñuñoa"- y la calificó de "injusta". Algunos medios destacaron más esto último que el anuncio.


Esa misma jornada, el Presidente celebró el día de los bomberos vistiendo uno de sus trajes, imagen que privilegiaron algunos canales de televisión por sobre el Plan Auge.

El jueves, el Presidente presentó su plan contra la delincuencia. Paralelamente, el ministro de Transportes, Felipe Morandé, anunciaba la reforma al Transantiago.

Los expertos consultados destacan que los dos temas eran iniciativas importantes que debían privilegiarse porque fortalecían la imagen del Gobierno, pero que al lanzarse al mismo tiempo disminuyeron su cobertura en los medios y, por lo tanto, su impacto en la gente.

Tener un equipo de avanzada que anticipe escenarios conflictivos


Otro episodio cuestionado ocurrió el 23 de junio, cuando el rector de la Universidad de Chile, Víctor Pérez, criticó delante del Presidente el proyecto de La Moneda para reformar el sistema universitario.


Los miembros de los equipos presidenciales anteriores afirman que antes de una ceremonia en que habla el Mandatario, se deben pedir los discursos de las otras autoridades para evitar que el Jefe de Estado se vea sorprendido. En gobiernos anteriores, agregan, se pidió que se cambiaran algunas referencias que eran muy duras con el Presidente.

En el oficialismo afirman que Piñera sabía que la intervención de Pérez podía ser complicada porque el fin de semana anterior había trascendido a la prensa la reforma, pero que de haberse ausentado de la ceremonia, las críticas hubiesen sido peores.

A Bachelet la asesoró en este punto su amiga María Angélica Álvarez (la Jupi); a Lagos su cuñado Pedro Durán; a Frei, Miguel Salazar, y a Aylwin, Marcelo Trivelli y su yerno Carlos Bascuñán.


En el caso de Piñera, también se trata de un cercano: su sobrina María Teresa Chadwick. De cualquier modo, el Presidente no ha enfrentado aún situaciones tensas como la de Lagos, cuando fue increpado por familiares de las víctimas de Alto Hospicio. O Bachelet, reprendida por pobladores de Chiguayante cuando hablaba con la prensa mientras una retroexcavadora buscaba a las víctimas de un alud.


Nunca enfrentar al Mandatario con personajes populares


El miércoles por la mañana, antes de que se concretase la reunión entre Piñera y Mario Kreutzberger, había preocupación en La Moneda. El replanteamiento del proyecto Bicentenario que remodelaba el Teatro Teletón podía provocar un impasse entre el animador y el Presidente.

Esa posibilidad, dicen, habría terminado por construir un pésimo escenario, en el que en menos de dos semanas el Mandatario se hubiese enfrentado con tres de los personajes más populares del país: Don Francisco, Marcelo Bielsa y Stefan Kramer.
Según los ex inquilinos de La Moneda, en los gobiernos pasados siempre se optó por no responder críticas o desaires si venían de figuras "queridas" por la opinión pública.

Por el contrario, se privilegiaba que los mandatarios aparecieran cercanos a figuras como el cantante Bono (en el caso de Ricardo Lagos) o Shakira (Michelle Bachelet).
Incluso, agregan, se evitaron conflictos con personajes de menor influencia.

La ex Presidenta, por ejemplo, se mostró indiferente cuando la modelo María Eugenia Larraín la criticó por no reunirse con el Dalai Lama, y Ricardo Lagos hizo lo mismo cuando Marco Enríquez lo cuestionó en la cinta "Los héroes fatigados".


No mostrar al Presidente como un eterno candidato

Hay imágenes del Presidente Piñera que entre los ex asesores son vistas más como actitudes de campaña que como las de un Jefe de Estado.


Como ejemplos citan el momento en que el Mandatario se subió a una moto o se disfrazó de época para el Día del Patrimonio Nacional. Según este análisis, esas actitudes se justifican en campaña porque el elector retiene la imagen del candidato, pero la misma acción realizada por el Presidente conlleva el riesgo de dañar su autoridad o llamar a bromas como el mote de "conde Vrolok", que se le inventó a Piñera cuando se disfrazó.

"Se debe recurrir a salidas de protocolo por un motivo de fondo, no porque sí nomás", dice uno de los asesores. Lagos, por ejemplo, cuando se sacó la camisa y se metió al mar en Chañaral, lo hizo porque era necesario mostrar que el gobierno había logrado descontaminar esa zona.


En la Alianza, en todo caso, destacan que las salidas de libreto son propias de Piñera y que la gente votó por él tal como es.

domingo, 11 de julio de 2010

¿ ESPIAS O FARSANTES ? intrigas del PODER

Más de una interrogante ha despertado la "captura" de diez personas presuntas espías a favor de Rusia, en los Estados Unidos.

Cada hecho revelado en torno a estas diez personas nos dan cuenta que más parecen farsantes de una historia llena de dinero por donde se le evalúe y analice.

Casi todos los analistas y expertos en temas de espionaje - digo casi todos porque no faltan tontos útiles que defienden por defender a personas ligadas a actos delictivos - concluyen que estas personas NO TENIAN ACCESO A LAS FUENTES DEL PODER PARA ACREDITAR CONTUNDENTEMENTE SU "LABOR DE ESPIA".

Hoy podemos deducir que existe el espionaje y el mundo de los espías. Eso nadie lo puede negar ni mucho menos justificar, los ejemplos sobran además que la mayoría de Estados, por un asunto básicamente de defensa nacional, articulan sus dependencias de seguridad del Estado y de su servicio de inteligencia.

En mi país, el Perú, se ha dado el año pasado el descubrimiento de un oficial de la Fuerza Aérea Peruana (FAP) que espía - por unos dólares más o menos - a favor de Chile. Claro, que el país que gobierno Sebastían Piñera, es decir en los tiempos de Michellet Bachelet- negó rotundamente tal hecho, pero ahí están las pruebas y la detención y encarcelamiento del destituído oficial, Víctor Ariza.

Ahora, como entre los espías han detenido a una peruana periodista, Vicky Peláez, y a su esposo nacionalizado peruano con el nombre de "Juan Lázaro" y hoy se conoce como un ruso convicto y confeso, los peruanos la mayoría - porque también en mi país no faltan las voces que defienden lo indefendible - nos quedado asombrado, por decir lo menos, de la confesión de la Peláez.

Por eso, en esta ocasión, se hace oportuna proporcionales dos comentarios dedicados al anàlisis de tan acontecimiento para que ustedes saquen sus propias conclusiones de unas personas que pueden ser calificadas con todo derecho de "farsantes" en una historia novelesca.


Los espías rusos: otra mirada

¿Por qué el país que tiene algunos de los mejores hackers del mundo y que es capaz de penetrar en los ordenadores más protegidos de otros países decide situar espías en suburbios de los Estados Unidos que operan de la manera más torpe imaginable y son pagados a través de bolsas de papel llenas de dinero enterradas en un parque?


La sorpresa que produce la captura de 10 espías rusos que vivieron durante años mimetizados en la sociedad estadounidense no es que los servicios de información rusos sigan tan activos como siempre.


Todos los países espían a sus rivales o vecinos y, a su vez, son espiados por estos. La verdadera sorpresa es que los jefes del espionaje ruso hayan decidido gastar tanto dinero, durante tanto tiempo, en un esfuerzo tan inútil.

¿Qué valiosos secretos puede obtener una pareja de espías rusos que junto con sus dos pequeñas hijas lleva una vida de clase media en Montclair, New Jersey?

¿O qué pensaban que descubriría Anna Chapman, cuyo principal teatro de operaciones eran las discotecas de Nueva York? Según documentos del FBI, el Servicio de Inteligencia Exterior ruso (conocido como SVR) le especificó a sus agentes en Estados Unidos la naturaleza de su misión y las expectativas que de ellos se tenía en C, el cuartel general del SVR. El mensaje, interceptado por el FBI, decía: "Usted ha sido enviado a EE UU en un viaje de larga duración.

Su educación, cuentas bancarias, coche, casa, etcétera, deben servir a un único propósito: alcanzar su misión principal, que consiste en buscar y desarrollar vínculos en círculos de formulación de políticas en EE UU y mandar informes de inteligencia a C".

¿Y qué le interesaba a C? El año pasado, por ejemplo, C le pidió a Richard Murphy (cuyo verdadero nombre es Vladímir Guryev) que recabara detalles acerca de la posición de la Casa Blanca con respecto a: 1) el tratado de reducción de armas estratégicas entre Rusia y Estados Unidos; 2) Afganistán, y 3) el programa nuclear de Irán. Nada más que eso...

Pobre Guryev-Murphy.

Esta es una verdadera misión imposible.

No por peligrosa, sino por desatinada.

Primero porque ni los más cercanos colaboradores de Obama, ni los más informados analistas de los think-tanks, ni los mejor conectados periodistas de investigación de Washington hubiesen podido responder a estas preguntas. Y segundo porque una simple y breve búsqueda en Internet confirmaría que el reto no es encontrar la información, sino saber cómo procesar la montaña de datos y análisis sobre estos temas a los que se puede acceder libremente en La Red.


Muy probablemente la suposición de C era que sus espías obtendrían la información no por Internet, sino a través de sus contactos dentro del Gobierno estadounidense.

Hoy, gracias al constante seguimiento a los que los tuvo sometidos el FBI durante años, sabemos que ninguno de ellos llegó siquiera a conocer superficialmente a funcionarios que manejan información que no se consigue libremente en Internet.


También sabemos que los espías tampoco se esforzaban demasiado a la hora de desarrollar estos contactos. La vida en los suburbios de Boston, Virginia y en Manhattan ofrece demasiadas distracciones agradables.


Es posible entonces especular sobre la metodología fundamental en la que se basaban los informes que enviaban estos espías rusos a la SVR: leer, cortar y pegar textos recabados de fuentes abiertas y quizás tener conversaciones con observadores bien informados sobre estos temas para luego mandar un informe a Moscú. No mucho más que no se hubiese podido llevar a cabo -y seguramente se lleva a cabo- en la sede de la SVR.

Nunca sabremos exactamente por qué los rusos mantuvieron durante tanto tiempo una iniciativa tan inútil.

La esperanza de que algún día estas células se pudiesen activar o que descubrieran un tesoro de información confidencial o que reclutaran una valiosa fuente dentro del Gobierno son claramente posibilidades que justifican estas actividades a pesar de su inutilidad durante décadas.


Pero la Rusia de estos tiempos también nos ha acostumbrado a que cuando hay sorpresas o situaciones incompresibles, tarde o temprano aparece una explicación que resulta válida con inusitada frecuencia. Esta explicación alternativa también tiene que ver con C. La c de corrupción




Historias de espías

Por Fernando Rospigliosi

Vicky Peláez ha saltado a la fama internacional, probablemente de una manera no deseada por ella.

La sorprendente historia de los topos rusos es inédita.

Ha habido muchos casos de espionaje descubiertos en los Estados Unidos y Rusia, pero es difícil recordar un número tan elevado de rusos encubiertos, ocultando su nacionalidad y haciéndose pasar por norteamericanos o uruguayos.

El otro hecho que llama la atención es el escaso nivel de información al que tenían acceso varios de los espías.

Todo indica que Vicky Peláez y su esposo, el ruso-peruano-uruguayo Mikhail Anatonoljevich Vasenkov, alias Juan Lázaro, no podían alcanzar ninguna información sensible. Aún integrando una red de apoyo logístico, su papel no era importante.

Incluso la atractiva Ana Chapman estaba marcada y difícilmente podía cumplir el papel de la famosa Christine Keeler, la amante del ministro de Defensa británico John Profumo y del espía ruso Yevgeny Ivanov, suceso famoso en 1963.

La Chapman, que no ocultaba su origen ruso, es hija del agente de la KGB Vassili Kushchenco, hecho que no podía pasar desapercibido para las agencias de inteligencia norteamericanas.

Un topo

El caso de “Juan Lázaro”, que llegó al Perú como uruguayo –obviamente con documentos falsificados por la KGB– en 1976, es el típico topo infiltrado por la inteligencia soviética de aquel entonces.

Los soviéticos tenían en esa época su principal base en Sudamérica en Lima. La dictadura militar izquierdista había comprado tanques, aviones, misiles antiaéreos y muchas armas a la URSS. La embajada soviética cobijaba a centenares de funcionarios, muchos de ellos agentes de inteligencia protegidos por la inmunidad diplomática.

Y, tal como lo muestra el caso de Vasenkov-Lázaro, también a topos encubiertos bajo pasaportes falsos, que complementaban la labor de los otros.

A mediados de los 80 el Perú había dejado de ser un país importante para la URSS y probablemente por eso trasladaron a Vasenkov-Lázaro a los Estados Unidos.

Inercia

Que los rusos espíen a los norteamericanos y viceversa no es novedad. Que lo sigan haciendo a pesar de que la guerra fría ha terminado, tampoco. En realidad, todos los países que pueden hacerlo espían a sus adversarios y a sus amigos.

Es famoso el caso de Jonathan Pollard, que espiaba a la marina norteamericana por cuenta de Israel, a pesar de que son aliados y amigos.

Pero además del interés en conocer los secretos de los demás, también está la inercia de los servicios de inteligencia. Son organizaciones grandes, poderosas, con mucho personal y dinero, y con fuerte influencia sobre sus gobiernos.

Difícilmente los políticos están dispuestos a liquidar o reducir significativamente esas organizaciones. Siguen funcionando, pese a que sus objetivos son más limitados y sus resultados pobres.

En el caso de Vasenkov-Lázaro, estaba allí, tenía décadas en la organización, y seguía en la planilla, aunque al parecer sus servicios no eran relevantes.

Respaldo a Vicky

Vicky Peláez suscitó una ola de solidaridad en ciertos sectores, simpatía injustificada como se puede apreciar ahora. La defendían por ser peruana, como si el hecho de haber nacido aquí la convirtiera en una persona libre de culpas.

Sin embargo, también ha recibido críticas. Un periodista peruano que trabajó en La Prensa con Vicky Peláez, entrevistado por Chema Salcedo y Milagros Leyva en RPP, fue muy duro. Dijo que “escribía con la izquierda y cobraba con la derecha”, aludiendo a la Rusia de Vladimir Putin, que le pagaba. Y añadió que los rusos eran muy generosos porque habían entregado a espías de nivel a cambio de “chauchilla”. (RPP, 9.7.10).

Un cubano que trabajó 15 años con ella en La Prensa de Nueva York, la describió en un blog como alguien de “fuertes contrastes de carácter: agria y fanática a rabiar la mayoría de las veces; ingenua y dulce las menos” (Miguel Ángel Sánchez, 2.7.10)
Respecto a sus artículos dice que “su lenguaje era soez, de barricada y hedor de albañal, con terminología marxista muy pasada de moda”.

Y agrega que “lo escandaloso, sin embargo, era que en numerosas ocasiones dichos artículos eran dictados telefónicamente por su marido Juan (Juancho) Lázaro, o sencillamente copiados de cualquier otro lugar. (…) Hace unos dos años, Peláez fue suspendida de empleo y sueldo en el diario tras comprobársele que muchas de sus crónicas eran plagios”.

Finalmente la coartada de que era una perseguida política se derrumbó, al aceptar los esposos Vasenkov-Peláez su culpabilidad. A fin de cuentas, no se trataba de ideología o política, sino de dinero, porque nadie puede pensar que el gobierno ruso es de izquierda, como se proclamaban Vasenkov-Peláez.

miércoles, 7 de julio de 2010

ESCANDALO EN EL CIMA DEL PODER EN FRANCIA

Tremendo escándalo político remece los cimientos de la política francesa que alcanza al Presidente galo, Nicolás Sarkosi, tras conocer que habría recibido 150 mil euros para su campaña política.

La raíz de la grave denuncia tiene como fondo unas grabaciones hechas por el ex mayordomo de la mujer más rica de Francia. En esas grabaciones existe un audio que implica seriamente al ex tesorero del partido de Sarkosi.

Un dato que gráfica el escándalo: EXISTE EL RUMOR QUE LOS PRINCIPALES POLITICOS FRANCESES PASABAN POR LA CASA DE LA MAGNATE PARA RECOGER UN SOBRE LLENO DE DINERO.

Así es podemos analizar que la "cultura de las grabaciones" pone al descubierto negociados y corruptelas que debilita y afecta la política francesa.

Las crónicas del diario El País nos da mayores detalles:




Escándalo político en Francia

El 'caso L'Oréal' salpica de lleno a Sarkozy

La ex contable de la mujer más rica de Francia declara a la policía que el presidente recibió financiación ilegal para su campaña - "Preparé un sobre con 150.000 euros"



El lunes, al ser llamada por la policía, la que fue contable de la mujer más rica de Francia se dijo a sí misma: "Es hora de contar lo que pasó".

Y lo ha hecho.

Claire Thibout, ex empleada de Liliane Bettencourt, que heredó el imperio L'Oréal, contó primero a los expertos policiales y luego al periódico digital Mediapart, entre otras revelaciones explosivas, que el partido de Nicolas Sarkozy, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), se benefició de 150.000 euros en efectivo provenientes de la fortuna de Bettencourt para su campaña electoral de 2007.

La ex contable también aseguró que Sarkozy, desde 1983 hasta 2000, esto es, durante sus años de alcalde de Neuilly, localidad cercana a París donde vive Bettencourt, pertenecía al conjunto de políticos que pasaba con frecuencia por el palacete de la familia a comer "y luego se iban con un sobre con dinero".

Así, el caso L'Oréal, hasta ahora centrado en el ministro de Trabajo, Eric Woerth, acusado sobre todo de conflicto de intereses, afecta ya al mismo corazón del Estado francés: el Elíseo. Desde allí, se apresuraron a desmentir todas las acusaciones.

Pero el Gobierno de Sarkozy, noqueado desde hace días por la retahíla de escándalos sobre este asunto, se tambalea: hay diputados de su propio partido que reclaman que el cambio de ministros anunciado por Sarkozy para el próximo mes de octubre se lleve a cabo ya.

Y el portavoz del grupo de la UMP en la Asamblea Nacional, Jean-François Copé, ha pedido al presidente de la República que se dirija a los franceses a fin de "poner las cosas en perspectiva".

La ex contable no aporta pruebas.

Pero sí da detalles que otorgan al relato, al menos, verosimilitud.

Thibout cuenta a Mediapart que, tras la muerte de André Bettencourt, marido de Liliane y varias veces ministro, era el gestor personal de la fortuna de la anciana, Patrice de Maistre, el que se ocupaba de "pagar a los políticos".

Y que este, a finales de marzo de 2007 (dos meses antes de las elecciones presidenciales, pues), le pidió 150.000 euros en efectivo.

"Yo le pregunté para qué y él me respondió: 'Para financiar a Sarkozy'.

Le contesté que solo tenía autorización para sacar del banco 50.000 euros cada semana.

Insistió, con un verdadero ataque de nervios, pero yo me seguí negando.

Luego le di los 50.000 a madame Bettencourt, que los metió en un sobre y se los dio a De Maistre, delante de mí.

Puse en el cuaderno de contabilidad: 'Bettencourt', que era lo que ponía cuando se trababa de sumas para políticos a fin de no dejar huellas", asegura Thibout.

"Después, de la cuenta de Ginebra sacó los 100.000 que faltaban. Y me dijo que tenía una cena muy pronto con Eric Woerth [por entonces solo tesorero de la UMP] para darle discretamente el dinero".

La contable, que trabajó en la casa Bettencourt desde 1995 hasta 2008, relata después las "comidas con sobres" para políticos que, según ella, eran toda una costumbre en el palacete:


"Dedé [así se conocía en la casa a André Bettencourt] siempre financió a la derecha, no lo ocultó. Era un auténtico desfile. Y les daba generosamente, 100.000 o 200.000 euros".

A estas comidas acudía Sarkozy: "Era un habitual. Venía mucho con [su anterior esposa] Cecilia.

También él recibía el sobre.

Todo ocurría en un saloncito de la planta baja, cerca del comedor, después de comer (...) El día que venía algún político, tanto Sarkozy como otros, me pedían que preparase un sobre almohadillado de tamaño medio".

Ya nadie se acuerda en Francia de que todo el asunto empezó siendo, simplemente, la exhibición pública de los trapos sucios de una familia (riquísima, eso sí).

En el fondo, un culebrón mediático-sentimental con madres, hijas y presuntos seductores de ancianas ricas que, de golpe y porrazo, gracias a unas grabaciones furtivas elaboradas por el mayordomo y ahora las declaraciones de la contable, se ha convertido no solo en un asunto de Estado sino en uno de los mayores escándalos de la legislatura.

Sarkozy, en una visita en un hospital, prefirió referirse al tema de refilón, desde una hipotética posición de altura -no como afectado- con una muesca de asco y de desprecio aseguró: "Me gustaría que mi país se interesara más por temas como la jubilación y no que se abalanzara sobre el primer horror o calumnia que llega".

Woerth, ministro encargado de tramitar la decisiva reforma de las pensiones, acosado ya desde varios frentes, se encuentra ahora también en el ojo del huracán por su labor de tesorero de la UMP durante ocho años.

Ayer acudió a la cadena de televisión TF1 a defenderse.

Nervioso, irritado, combativo, confuso, negó los hechos, culpó al Partido Socialista de estar detrás de la campaña, a su juicio, orquestada contra él y aseguró que no va a dimitir.

"No hay ninguna razón para hacerlo", señaló.

Y añadió, dirigiéndose a la presentadora: "Nunca, y míreme a los ojos, he tocado un euro ilegal". Antes, en la Asamblea, a sus compañeros diputados, les confesó sin precisar: "Tengo ganas de estrangular a alguien".


La millonaria, el mayordomo, el dandi y el ministro


Tormenta política por unas grabaciones a la mujer más rica de Francia que salpican a la esposa del ministro de Trabajo


Durante casi un año, desde mayo de 2009 hasta abril de 2010, uno de los mayordomos de Lilliane Bettencourt, la mujer más rica de Francia, sirvió el té y recogió la mesa con una pequeña grabadora escondida en el forro de la chaqueta y registró muchísimas horas de conversaciones privadas.

No son conversaciones cualesquiera y ahora, de carambola, amenazan con desestabilizar al Gobierno de Nicolas Sarkozy dado las jugosas revelaciones que contienen:

La primera, que Florence Woerth, la esposa del ministro de Trabajo, Éric Woerth, trabajaba como asesora económica de la millonaria de la que además se ha sabido (gracias al mayordomo grabador) que escondía en Suiza varias cuentas opacas y que poseía nada menos que una isla en las Seychelles sin declarar. La mujer de Woerth ya ha dimitido, pero da la impresión de que el culebrón no ha hecho sino comenzar, dada la cantidad de grabaciones acumuladas.

Lilliane Bettencourt, de 87 años, única heredera del creador y fundador del imperio L'Oréal, disfruta de una fortuna de 16.900 millones de euros.

Desde hace más de un año y medio, esta mujer discreta se encuentra en el ojo del huracán debido a que su hija ha pedido que quede inhabilitada para gestionar su inacabable fortuna.

La causa, los regalos de más de 1.000 millones de euros en dinero, obras de arte, posesiones y seguros de vida, entre otros, que la riquísima anciana le ha hecho en los últimos años a un conocido dandi, fotógrafo de profesión y escritor de renombre, llamado Jean-Marie Bannier, de 64 años, famoso en su tiempo por llevar a Dalí de paquete en su moto.

El mayordomo ha explicado al semanario Le Point que actuó por propia iniciativa, aterrado por el ambiente envenenado que vivía en la casa.

El abogado de la anciana ya ha acusado al letrado de la hija de estar detrás de todo.

El contenido de las grabaciones, en poder de la prensa, ha dejado de pertenecer a la esfera privada de la familia para convertirse en un asunto casi de Estado.

En una de las grabaciones, Patrice de Maistre, gestor de la fortuna de Bettencourt explica a la anciana:

"El marido de madame Woerth, a la que usted emplea, una de mis colaboradoras, es el ministro de Presupuesto, es muy simpático y además se ocupa de sus impuestos, lo que encuentro no poca cosa. Es muy simpático, un amigo".

Otro día, Maistre advierte a Bettencourt que se va a ocupar "de cierta cuenta de 65 millones de euros que tiene en Suiza" debido a los acuerdos antifraude con Francia.

"Hay que llevarla a Hong Kong, Singapur o Uruguay. Si la devolvemos a Francia, va a ser complicado. Así estará usted tranquila".

De las conversaciones no se desprende que la mujer del ministro Woerth hiciera algo delictivo. Pero ¿estaba al corriente de las finanzas oscuras de Bettencourt? ¿Alertó a su marido, por entonces el ministro encargado de luchar contra el fraude fiscal?

Por lo pronto, su dimisión como asesora de la millonaria es, según líderes de la oposición, una especie de reconocimiento de que no actuó bien al aceptar el cargo.

El diputado socialista Arnaud Montebourg ha ido más lejos: "Tenemos a un ministro de Presupuesto[cargo que tenía el año pasado, cuando se grabaron las conversaciones] que al mismo tiempo era el tesorero de la UMP [el partido de Sarkozy] cuya mujer trabajaba organizando el fraude fiscal de la señora Bettencourt".

La millonaria ha anunciado que va a ordenar que todas sus cuentas en el extranjero vuelvan a Francia. ¿Y el mayordomo? Aún protegido por el anonimato, deberá hacer frente a una denuncia por "violación de la intimidad".

lunes, 5 de julio de 2010

EL PODER DE LA DEMOLICION POLITICA...

Uno de los políticos más connotados del Perú, José Barba Caballero, todos los lunes nos ofrece una visión especial acerca del poder y la política.

La lectura de su columna escrita en un diario limeño amerita un análisis de todos aquellos que son estudiosos del misterio del PODER.

Hoy lunes 05 de julio nos ofrece una clase de DEMOLICION POLITICA puesta en ejecución en la contienda política entre los dos principales candidatos a la Alcaldía de la capital del Perú, como es Lima.

Es así que la candidata por Unidad Nacional, Lourdes Flores Nano, a través de sus principales voceros articuló una campaña de demolición contra Alex Kouri, candidato de Cambio Radical, arriconando a éste tras una serie de acusaciones ligados a la corrupción.

Barba Caballero analiza este hecho y expresa su recomendación:


La demolición en política por José Barba Caballero

Goebbels dijo, y no en broma: �La Iglesia Católica se mantiene hasta ahora porque viene repitiendo lo mismo hace dos mil años�.

Con este mismo método se procede tanto en la propaganda comercial como política: todo el truco consiste en ser pertinaz como una gotera, porque la gente sólo recuerda algo cuando se le repite miles de veces. Así es como se vende jabones� así es como se destruye honras.

Los nazis y los comunistas, que fueron maestros en el arte de demoler adversarios, sabían que primero hay que escoger la etiqueta que se corresponde con el objetivo a machacar, como por ejemplo: corrupto, derechista, borracho, homosexual, vende patria, entre otros.

Para que cualquiera de estas etiquetas prospere, los militantes deben repetir el infundio por calles y plazas, los medios de prensa tienen que contribuir con primeras planas y cada fin de semana deben electrizar al televidente con nuevas denuncias.

En una campaña así, cualquier indicio es una prueba, cualquier testigo adiestrado un testimonio irrefutable. La idea es ensuciar hasta que la etiqueta se confunda con la piel.

Una campaña de demolición puede arrancar de un trapo oscuro del pasado, de denuncias extemporáneas y archivadas, de propiedades que al parecer no se justifican con los ingresos, de donaciones sospechosas y hasta de una simple fábula de un sicario político.

Conducir una campaña sucia exige que se siga de cerca la progresión y que se le sepa alimentar continuamente con informaciones nuevas que aumenten la desconfianza.


La rapidez en este caso es fundamental: es preciso difamar a un ritmo tal, que cuando la víctima responda, la atención del público ya esté en la siguiente difamación.

Lo que me parece increíble de esta historia es cómo un hombre con la experiencia de Kouri se puede haber dejado arrinconar con este manual elemental de demolición política.


Él tiene cómo demostrar que quienes lo tachan de corrupto son en verdad los corruptos; pero algún descocado le ha convencido que no debe atacar el cinismo de sus adversarios, que no debe indignarse con la prensa mercenaria.

Con esta estrategia: �Ante un insulto una propuesta�, posiblemente ganará el cielo, pero con toda seguridad perderá la elección. Aun así, todavía está a tiempo� siempre que pase a la ofensiva y recupere la iniciativa.

domingo, 4 de julio de 2010

DOS HISTORIAS COMO PARA EL CINE

El mundo aún no deja de sorprenderse ante las reacciones de la mente humana que nos ofrece cada situaciòn que realmente merece explicaciones y es más aún cada caso merece ser llevada a la pantalla gigante.

Dos casos nos las brinda el diario "El País", el primero de ellos ligado a las circunstancias dramàticas de la desaparición de una bella joven en Brasil producto, al parecer, de su relaciòn con un conocido jugador brasileño.

La crónica es rica en detalles.

La segunda es realmente increible en pleno siglo XXI. Se trata de la captura de magnate vinculado al narcotráfico. Es verdaderamente una historia que nos deja asombrado.

Sin más ni más, las crónicas:




Una historia de fútbol, sexo y sangre conmueve a Brasil


El portero y capitán del Flamengo, Bruno Fernandes, acusado por la policía como presunto asesino de su amante a quien primero intentó obligar a abortar


JUAN ARIAS


Mientras Brasil se lame las heridas de la derrota de su equipo en el Mundial, una historia en la que se mezcla fútbol, sexo, sangre y traición, está conmoviendo al país hasta el punto que esta mañana la revista Veja le dedica la portada al caso.


El protagonista es Bruno Fernandes, el portero y capitán del equipo del Flamengo, el más popular del país por lo que trasciende sus fronteras cariocas. La historia, que el país está siguiendo como una telenovela de horror, compitiendo con las famosas novelas de ficción de las televisiones, es una mezcla de crímenes, sexo y traiciones, con la segunda protagonista de la historia, la amante del futbolista, la joven Eliza Samuzo, desaparecida desde el día 9 de junio cuando habló por teléfono con tres amigas.

La policía no tiene dudas: "Todo indica que Eliza fue asesinada y Bruno es el primero y único sospechoso del crimen", afirma Edson Moreira, delegado jefe del departamento de Homicidios de Minas Gerais, donde la joven amante de Bruno se encontró con él antes de desparecer en el vacío.

El portero del Flamengo, venido como buena parte de los jugadores brasileños del submundo de la miseria y del crimen de las favelas, conoció, según él mismo afirma a Veja, a su futura amante en una noche de orgía en la que "había de todo: hombres, mujeres, jugadores, amigas de Eliza, putas...". Y subrayó: "Esas fiestas que son comunes en nuestro medio".

Eliza había ya hecho filmes porno y desde niña su sueño era conquistarse a un futbolista. Abandonada por la madre a los cinco años, se sabía de memoria los nombres de los equipos de su corazón, empezando por el Flamengo. Según ella, quedó embarazada de Bruno aquella misma noche de la orgía sexual. El futbolista confiesa que se le rompió el condón y que pasó tanto miedo que al día siguiente fue a hacerse el examen del sida.

Cuando supo que Eliza se había quedado embarazada, hizo todo lo posible para que abortara. Había ofrecido 40.000 reales a quien la convenciese a deshacerse del hijo. Hasta le suministró presuntamente una sustancia abortiva que no funcionó y que un examen de sangre confirmó.

Nacida la hija, Bruno cambió de táctica, volvió a ser delicado con ella, fue a conocerla, de meses y se ofreció a hacer el examen de ADN para confirmar su paternidad. Eliza se ilusionó y llegó a sentirse feliz a la espera de que Bruno pudiera pasarle una buena pensión.

De repente, la sospecha de la emboscada y del crimen. Eliza se evaporó. La policía ha encontrado manchas de sangre en un coche propiedad de Bruno. La policía lo está analizando.

En el mismo jeep en que aparecieron las manchas de sangre, la policía encontró también un par de gafas de marca Dolce&Gabana y unas sandalias negras de tacón alto. Cuando una amiga de Eliza vio los objetos no tuvo duda y confesó a la policía: "Son suyas".

La historia, en tiempo de Mundial, donde los futbolistas son ídolos en los que millones de jóvenes se identifican con pasión, la historia de terror y crimen del potero del Flamengo, no sólo está movilizando, horrorizada, a la opinión pública sino que está siendo analizada con preocupación por sociólogos y psicólogos.



El Don cayó al abismo


El seguimiento a un chatarrero llevó a la policía hasta el empresario José Mestre, director de una terminal del puerto de Barcelona, preso por supuesta relación con una red de narcotráfico


JESÚS DUVA



Don José, perdone que le moleste. Pero necesitamos que venga a la nave donde estamos abriendo el contenedor sospechoso. Tenemos un problema con un empleado de su empresa.


-Sí. ¡Faltaría más! Ahora voy. Estoy en mi despacho, pero tardo unos minutos.

El que atendía tan solícito a la llamada era José Mestre Fernández, de 53 años, director de la terminal de carga de Barcelona y dueño o socio de un conglomerado de 64 empresas. Y quien estaba al otro lado del teléfono era uno de los inspectores de la Brigada Central de Estupefacientes.

Poco antes, los policías habían requerido la ayuda de Mestre para que les facilitara un local en el que abrir un contenedor de chatarra llegado de Panamá en la madrugada del pasado 22 de junio. Los agentes tenían la firme sospecha de que el contenedor llevaba algo más que hierros viejos: un cargamento de cocaína.

-Inspector, ¿qué sucede? ¿Con cuál de mis empleados tienen un problema?

-El problema es usted. Tenemos que detenerle. Mire lo que hay dentro de ese contenedor. Es cocaína. Y poseemos indicios para creer que usted tiene relación con una organización de traficantes.

-Voy a llamar a...

El policía no dejó terminar la frase a Mestre. Acto seguido le rogó que pusiera sus manos a la espalda para esposarle. Al sentir el frío metal en sus muñecas, el rico y poderoso empresario hizo un mohín de disgusto, pero se dejó llevar mansamente hasta el coche patrulla.

Él, que tenía como amigos a personas del más alto nivel, se veía en esta situación por culpa de las 10 bolsas de deporte cargadas con 202 kilos de cocaína ocultas entre la chatarra. Él, que el pasado 25 de mayo había recibido de manos del presidente de la Generalitat, José Montilla, el premio que le acredita como "mejor empresario nacional del año" en el sector de logística.

El arresto de Mestre y 14 personas más era el punto final de la Operación Guadaña, una compleja investigación iniciada en agosto de 2009 por el Grupo 42º de la Brigada de Estupefacientes y el Grupo de Respuesta Especial al Crimen Organizado de Galicia (GRECO). Desde entonces, el caso estuvo bajo la supervisión del juez Fernando Andreu, de la Audiencia Nacional.

El hilo inicial de las pesquisas fue Higinio Alonso Agudo, de 72 años, dueño de un entramado empresarial del que forma parte Chatarras Cano, una firma dedicada a la comercialización de metales y chatarrería. Sin embargo, los policías sospechaban que esa empresa era una tapadera de otro tipo de actividades delictivas, contando para ello con un almacén alquilado en Campo Real, a 20 kilómetros de Madrid.

Siguiendo el rastro de Alonso, que tiempo atrás había sido detenido en Holanda por narcotráfico, los investigadores detectaron al colombiano Olmer Valencia Tabares, de 52 años. Este ex torero, residente en Madrid, supuestamente servía de enlace con un grupo de suministradores de droga presuntamente liderados por Héctor Murillo Rivera, un mexicano de 42 años.

El pasado enero, Valencia viajó a Panamá y se reunió con Murillo para perfilar la puesta en marcha de un negocio conjunto, según la policía. Dos meses después sería Murillo quien se desplazara a España para comprobar la infraestructura logística, de transporte, almacenaje y distribución de la mercancía.

Y fue entonces, a mediados de marzo, cuando saltó la sorpresa: los agentes antidroga vieron cómo el tal Murillo se reunía en la terraza de un hotel de Barcelona con un hombre trajeado, que resultó ser José Mestre. Nada más y nada menos.

Parecía increíble que alguien de su estatus tuviera amistades tan peligrosas. Pero el encuentro entre Murillo y Mestre había sido vigilado y fotografiado por los agentes.

Y estos no tenían la menor duda de que aquel hombre era quien era: el dueño de un imperio empresarial y de una espléndida mansión en el barrio de Pedralbes, amante de las obras de arte -seis cuadros de Miró, cuatro de Picasso, un nonell y un tàpies colgaban en las paredes junto a fotos con el Rey- y coleccionista de Rolls Royce, Porsche Cayenne, Mercedes SLR McLaren y otros coches de lujo. "Nos saltaron todas las alarmas", dice el inspector que lleva el caso.

En fechas sucesivas, Murillo y Mestre fueron observados en dos ocasiones más conversando en la terraza del hotel, tras lo cual ambos se intercambiaron varios correos electrónicos misteriosos y aparentemente incomprensibles.

Cuando las indagaciones estaban en su punto álgido, los policías se quedaron pasmados al saber que Mestre iba a ser galardonado como "mejor empresario nacional" por su labor al frente de Tercat, debido a que esta empresa "se ha posicionado como una de las compañías impulsoras de la competitividad y optimización de sistemas portuarios en el Mediterráneo y a nivel mundial", según una nota de prensa.

Los pinchazos sobre los teléfonos de los sospechosos convencieron a los policías de que los narcos estaban al rojo vivo. Y, pese a que hablaban en clave, más de una vez se referían a alguien al que apodaban El Don, el apelativo que suelen usar los mafiosos para referirse al jefe de una familia.

El grupo criminal hizo llegar a Barcelona dos contenedores de chatarra para probar si el engranaje funcionaba correctamente. Y funcionó: la ruta era la adecuada, y las empresas importadora y exportadora estaban aparentemente fuera de toda sospecha. O, al menos, así lo creían los narcos a la vista de que la mercancía salió del puerto sin el menor contratiempo.

A la vista del éxito, los traficantes enviaron desde Panamá otros dos contenedores de chatarra, pero uno de ellos con 202 kilos de cocaína en sus tripas. A las pocas horas de que el cargamento llegase a Barcelona, la policía desbarató todo el entramado con un golpe de guadaña. Punto final a la Operación Guadaña.

Fuentes policiales señalan que en los recintos aduaneros se revisa la documentación de cada uno de los contenedores que llega al puerto, pero admiten que es imposible inspeccionar uno a uno. De ahí la extrema dificultad de impedir la entrada de droga por este conducto.

En esta ocasión, los responsables de la investigación destacan que no solo han interceptado un importante alijo de cocaína que al por menor habría logrado un valor de 12 millones de euros, sino que han conseguido "el desmantelamiento de una compleja organización que operaba entre España y América".

Entre los 15 detenidos en la redada está Daniel Martín Cabrera, de 38 años, una especie de secretario o recadero privado de Mestre, que llevaba encima cinco teléfonos móviles. Uno de ellos, con una pegatina con la inscripción El Don y que únicamente usaba para comunicarse con su jefe.

Al registrar la casa del acaudalado empresario, dotada de cámaras y equipos de seguridad, los agentes no hallaron nada sospechoso, aunque comprobaron que guardaba 60.000 euros en billetes de 500 y de 100 . "Es para los gastos corrientes", explicó.

Y fue lo único que dijo porque se negó a declarar ante la policía en presencia de su abogado, José María Cánovas Delgado. Después, el juez le envió a la cárcel. Por ahora, ha cambiado su lujosa residencia por una diminuta celda de la Modelo de Barcelona.

ESPIAS Y MAS ESPIAS...UNA PERUANA?

Hace una semana exactamente el Perú, America Latina y Europa despertaron con una notica sensacional: EL FBI DETUVO A 10 PERSONAS ACUSADAS DE ESPIAR A LOS ESTADOS UNIDOS, entre los detenidos figura una periodista peruana, Vicky Pelàez, de clara simpatías izquierdistas, lo cual no es un delito en ninguna parte del mundo.

Sinembargo, lo más curioso del caso es que la periodista peruana está casada con un ciudadano uruguayo que tras las investigaciones resultó ser de nacimiento ruso y es más la fiscalía norteamericana ha dado a conocer un documento donde el tal "Lázaro", así lleva como apellido, se declara culpable y dice además que prefiere a su país, Rusía, que a su propio hijo.

En el Perú, como es de suponer, la reacciones fueron encontradas porque no se daba crédito a la acusación contra la periodista Vicky Peláez y es más tanto su madre como la hermana salieron a defender la inocencia de Vicky, pero luego de conocerse la declaraciòn fiscal, ellas han desaparecido del espectro mediático como por arte de magia.

Hoy en el diario "El País" de España hacen una crónica jocosa pero reflexiva sobre este nuevo episodio que alcanza a las dos grandes potencias mundiales: Estados Unidos y la ex Uniòn Soviética, más aún cuando hace apenas unos días la televisiòn exhibió imágenes de los dos Presidentes comiendo sendas hamburguesas en un establecimiento norteamericano.

La reflexión se las dejó a ustedes:


Muchos espías, pocos secretos


Los 10 agentes rusos detenidos en EE UU adoptaron nombres falsos y enviaban informes a Moscú -

Una de las infiltradas es hija de un ex miembro del KGB

Ninguno de los detenidos ha sido acusado de espionaje y a pesar de ello se sigue hablando de "los espías que llegaron de Moscú" para infiltrase en la sociedad estadounidense y reportar a la madre patria. Su camaleonización con el país de las barras y estrellas fue tan lograda que ni sus mismos hijos, nacidos en la tierra que hoy -4 de julio- festeja su independencia, sabían del camuflaje de sus progenitores. Y si hubieran tenido que elegir entre la descendencia o la tierra, habrían optado por lo segundo.



"A pesar de admitir que quiere a su hijo, nunca hubiera violado su lealtad al servicio", ha informado uno de los fiscales que a finales de esta semana presentaba cargos contra el acusado Juan Lázaro, cuya verdadera identidad sigue siendo una incógnita.

Lázaro es esposo de Vicky Peláez, periodista peruana que escribe en el diario en lengua española La Prensa de Nueva York y la única que ha reconocido vivir con su verdadero nombre.

La calidad del trabajo de los espías es ya otro asunto porque no parece que la seguridad nacional de Estados Unidos haya estado nunca amenazada. Hasta la fecha, el peor desastre de inteligencia en la historia del país ha sido protagonizado por uno de los suyos: el ex agente del FBI Robert Hanssen, detenido en 2001, quien espió desde su despacho oficial en Washington durante más de 20 años, primero para la URSS y, después, para la Rusia posterior a la caída del muro (escándalo llevado al cine por la película El espía, de 2007).

Si Hanssen no fue condenado a muerte es porque se declaró culpable de todos los cargos: pasa -y pasará- el resto de sus días aislado 23 horas de 24 en una prisión de máxima seguridad en Colorado.

Los 10 hombres y mujeres que en la noche del pasado domingo eran detenidos por el FBI mientras cenaban o descansaban plácidamente en sus hogares -en Nueva York, Boston, Alexandria (Virginia) o Montclair (Nueva Jersey)- se enfrentan a cargos de lavado de dinero y de conspiración para actuar como agentes sin registrarse ante la justicia de Estados Unidos. O sea, olvidaron comunicar al departamento correspondiente que habían llegado para conocer los secretos mejor guardados del poder norteamericano.

Conociendo lo que a día de hoy se conoce, la vida de los agentes rusos se acerca más al papel de Jim Wormold que al de James Bond. Dicho de otra manera: parece que Graham Greene hubiera reescrito Nuestro hombre en La Habana y, en lugar de situar la acción en la Cuba de Fulgencio Batista y a su protagonista como un gris vendedor de aspiradoras engañando al servicio secreto británico, hubiera inventado a un grupo de rusos olvidados por el Kremlin en el imperio del capitalismo que pasa sus días acudiendo a barbacoas en el patio trasero de sus vecinos durante las noches de primavera mientras por la mañana escribe mensajes en tinta china invisible para Moscú que parecen importar poco o nada.

De ninguno se sospechaba nada. "¿Espías, la señora Fowley una espía rusa?"; "¿los Murphy?"; "¿Donald, el que fue compañero en Harvard de Calderón [Felipe, actual presidente de México]?". Incredulidad y sorpresa. Esa fue la reacción más común a la detención de los 10 (otra persona, la número 11, logró salir de Estados Unidos antes de ser detenido; fue localizada en Chipre, cuando intentaba llegar a Hungría, y ahora vuelve a estar en paradero desconocido después de haber sido puesto en libertad bajo fianza y darse a la fuga). "¡¿Quién lo hubiera dicho?!".

¡Espías! Todo aquel que tiene un amigo ruso en Washington ha bromeado estos días con la pregunta: "Y a ti... ¿cuánto te paga el KGB?".

Pero cada día que pasa emergen nuevos detalles -todos aburridos y comunes al más común de los mortales- de la vida de 10 personas cuya existencia ha estado vigilada por el FBI desde mediados de los años noventa.

Sus casas inyectadas con cables y micrófonos a través de los cuales su existencia era de todo menos privada. Pero de los 10 agentes a sueldo del SVR (antiguo KGB, que con tanto ahínco trató de limpiar y remozar el actual primer ministro y ex presidente ruso, Vladímir Putin, quien a su vez fue un espía en el pasado), una mujer sobresale sobre todos los demás. "Anna Chapman podría haber calentado sin duda la noche más frígida de la Guerra Fría", decía un titular de prensa.

La frase es de la sección de Style del diario The Washington Post -dirigida por dos mujeres, por cierto-, pero se ajusta a la media. "Desde Rusia con amor"; "Al rojo vivo [por aquello del pelo pelirrojo] y espía"; "La espía que nos amó"; "Rusa peligrosa"; "Debería tener una cita conmigo en castigo", esta última es la sentencia más leída y aportada por sus nuevos admiradores en la página de Facebook de Chapman -nombre también adoptado-, 28 años, dedicada al sector inmobiliario en Manhattan a través de la red y cuyo padre fue al parecer un antiguo miembro del KGB soviético.

Esta semana ya ha habido vistas para imputar cargos a todos los detenidos. Algunas han quedado aplazadas hasta dentro de 15 días. Sólo Vicky Peláez podrá salir en libertad vigilada si abona la fianza de 250.000 dólares que le ha sido impuesta. El resto permanecerá en la cárcel. La justicia estadounidense cree que el riesgo de fuga es muy alto.

Y no porque puedan llegar hasta Chipre para ser detenidos y volver a escaparse, como el espía número 11. A cualquiera de los detenidos en Nueva York, por ejemplo, les valdría con caminar hasta cualquier sección consular rusa o hasta la misión de ese país en Naciones Unidas para adoptar su verdadera identidad y desaparecer para siempre. Pase lo que pase, se acabó el sueño americano al que parece se habían acostumbrado tan bien.

Como Nuestro hombre en La Habana, esta historia es una historia desmitificadora, casi desquiciada. Mensajes escritos en tinta invisible en la era de Google e intercambio de sobres con dinero en plena globalización financiera y el reino de los lobbys. Solo cabe esperar que nadie haya colado a Moscú el diseño de un microondas como el arma de destrucción masiva que no busca Irán.


La custodia de los hijos

Siete ciudadanos estadounidenses no saben lo que será de su futuro. Son los hijos pequeños y adolescentes de cuatro de las parejas que esta semana han sido detenidas como integrantes de una amplia red de espionaje ruso en EE UU.


Los servicios sociales de ciudades como Nueva York o Boston tendrán la última palabra en caso de que no existan ni familiares ni amigos que puedan asumir su custodia, lo que parece lo más probable dado el grado de clandestinidad en el que vivían sus padres.

Hasta el arresto de sus padres, todos esos niños y jóvenes vivían una vida de lo más plácida y ajustada a la norma. Hace apenas diez días, una de las hijas de Richard Murphy -nombre falso de uno de los acusados de conspiración- vendía limonada a cinco centavos junto a dos amiguitas del barrio, como suelen hacer los pequeños en estas fechas de calor para recaudar unas monedas.

El FBI ha tenido en cuenta la existencia de estos niños, ha asegurado una fuente oficial. "Todo estaba pensado y planificado".